3 Razones por las Cuales Tu Pareja puede Haber Cambiado Contigo

3 Razones por las cuales tu pareja puede haber cambiado contigo.

 

Antes de casarte, quizás tenías una idea muy diferente de lo que es la vida matrimonial que llevas ahora.

En el matrimonio o cuando vivís juntos, se van viviendo etapas que pueden convertirse en grandes retos y otras en hermosas satisfacciones.

Lo que hará que esa unión perdure con éxito será el compromiso que tengais con esa unión.

Si en la actualidad sientes que tu pareja ha cambiado, en este artículo te decimos las tres razones por las cuales es posible que eso haya pasado.

 

1- Los cambios de hábito

 

Cuando vivías bajo las reglas de tus padres, tuviste la oportunidad de desarrollar hábitos diarios de cuidados personales y del hogar, como rutinas de limpieza y orden.

Al casarse o vivir en pareja, esos hábitos se hacen evidentes, y quizás observes que ambos lleváis a cabo estas rutinas de forma diferente.

Si tu pareja ve que no tienes buenos hábitos de limpieza y orden, o viceversa, eso puede ser un poco decepcionante.

 

2-Las finanzas del hogar

 

Generalmente se espera que los hombres tomen la batuta de las finanzas de la familia.

Al inicio, esto puede ser un reto para ambos porque requiere de mucho equilibrio el simple acto de sentarse ambos a calcular los gastos y obligaciones que tienen ahora y poderlos repartir equitativamente durante el mes, así como decidir cómo irán haciendo los fondos para el alcance de sus metas a largo y medio plazo.

Si esto se toma de forma rígida, puede generar roces y hasta discusiones acaloradas.

 

Quizás, cuando erais novios, él te complacía en todo: si querías un vestido o unos zapatos, él te lo compraba o te ayudaba a pagarlo, pero ahora las cosas cambiaron, porque ahora tenéis esas obligaciones económicas por las cuales hay que responder.

Si pretendes mantener el mismo nivel de gastos de cuando erais novios, eso puede quebrantar la comunicación.

 

 

3-Pretender tener el mismo ritmo de vida que en el noviazgo

 

Si deseas hacer reuniones a cada momento o salidas con tus amistades, pretender que las cosas se hagan como las hacías en tu casa materna, o que tu pareja haga las cosas como las hacía mamá o papá, o practicar deportes o aficiones donde no involucres a tu pareja, eso es una gran falta de consideración de tu parte.

 

Ante estas 3 situaciones, es preciso hablar con tranquilidad y sentido común con respecto a los límites que se pondrán para darle prioridad a vuestra vida en pareja.

Seguro que con amor y cariño, podréis llegar a un buen acuerdo.

En cuanto al dinero, pacientemente lo que uno tenga para enseñar al otro en temas de finanzas, hacerlo.

Indiferentemente de quien ponga el dinero en la mesa, hay que comprender que ese dinero es de ambos como familia, eso reducirá los roces por malos entendidos en este particular.

Además, si ambos comprendéis bien el papel que cada uno desempeña en el matrimonio o vida en pareja, el amor que os tengáis hará que seáis flexibles y aprendereis a sobrellevar esas diferencias.

 

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